Este pasado jueves comparecí en rueda de prensa en Donostia en calidad de viceconsejero de Política Lingüística y presidente de la comisión especial ‘Euskera 21’ del Consejo Asesor del Euskera, junto a Iñaki Martínez de Luna, sociolingüista y director del proyecto EGOD (Discursos Básicos Sobre el Euskera) y de la comisión especial ‘Euskera 21’ del Consejo Asesor de Euskera. La convocatoria tenía como objetivo desarrollar un asunto de gran trascendencia: el que se refiere a las bases para el suelo común de un discurso compartido sobre el euskera.
Ante la prensa dimos cuenta de dos trabajos. Por un lado, definí los contenidos concretos de lo que podría ser la intersección entre los diversos discursos definidos en el proyecto EGOD. De hecho, en el marco del proyecto EGOD se han llevado a cabo numerosas investigaciones. La viceconsejería de Política Lingüística, tras analizar la información de dichas investigaciones, ha definido lo que sería el suelo común de estos discursos. Por otro lado, Iñaki Martínez de Luna presentó el resumen del informe del programa EGOD. Él ha sido su máximo responsable por encargo de la viceconsejería.
Antes de definir en qué consiste ese suelo común, se detalló la evolución del proyecto. La viceconsejería de Política Lingüística del Gobierno Vasco presentó a principios de legislatura su programa de trabajo. Una de las tareas que se marcó dentro de ese plan fue la de “trabajar y conocer los diferentes discursos que hay sobre el euskera en la sociedad vasca, contrastándolos y fomentando un debate sobre ellos, siempre con la participación más alta posible”.
El Consejo Asesor del Euskera, a propuesta de la viceconsejería de Política Lingüística, aprobó en su día el programa de trabajo para el ejercicio 2013-2014. En aquel programa quedó definida la siguiente tarea: “estudiar, contrastar, renovar y abrir vías que hagan posible la unificación de los discursos básicos sobre el euskera”. El trabajo de desarrollar esta tarea quedó en manos de la Comisión Especial ‘Euskera 21’. Para poder desarrollarla se puso en marcha el proyecto EGOD (Discursos Básicos Sobre el Euskera/Euskararen Gaineko Oinarrizko Diskurtsoak). El proyecto EGOD tiene como objetivo estudiar, contrastar, renovar y tratar de unificar los discursos sobre el euskera.
Es convicción de la viceconsejería de Política Lingüística que para actuar con eficacia en el proceso de revitalización del euskera precisamos de muchos elementos (necesitamos, entre otras cosas, una normativa y una política adecuadas, planes eficaces, medios, conocimiento científico o colaboración público-privada). Pero todos esos elementos que precisamos se sustentan sobre dos pilares imprescindibles: uno, la adhesión (voluntad) de la ciudadanía, y el otro, un amplio consenso social y político, un consenso cuantitativa y cualitativamente amplio. Sabemos, claro está, que con el consenso no basta, pero tan nítidamente como eso sabemos que el consenso es imprescindible para avanzar.
Resulta evidente que el euskera ha dado un gran salto en la CAPV a lo largo de estas tres últimas décadas. Para que ese salto se produjera, ha sido necesario un amplio consenso social y político. Sin el amparo y legitimación procurados por ese consenso, no hubiéramos construido el corpus jurídico-administrativo que hemos erigido ni habríamos desarrollado las políticas que en tantos ámbitos hemos llevado a cabo en amplia colaboración. Es preciso cuidar, actualizar, alimentar y revitalizar ese consenso social y político.
Se trata de una labor permanente. Y en esa labor, el discurso, concretamente el discurso sobre el euskera, adquiere una especial relevancia. El discurso sobre el euskera constituye una de las más arraigadas preocupaciones y tareas de la viceconsejería de Política Lingüística. Hay que recordar, ineludiblemente, el amplio y exitoso proceso ‘Euskara 21’. El documento titulado ‘Euskara 21: Bases para la política lingüística de principios del siglo XXI. Hacia un pacto renovado’ recoge el fruto de aquel proceso, un discurso renovado, unánimemente aprobado en 2009 por el Consejo Asesor del Euskera y posteriormente aprobado también por el Parlamento Vasco. Dando continuidad a dicho documento, en 2012 vino el ESEP (Plan de Acción para la Promoción del Euskera), hecho suyo también por el Consejo Asesor del Euskera y por el Parlamento Vasco.
Y ya en la presente legislatura, pusimos en marcha el proyecto EGOD. La cuestión del discurso es de la mayor relevancia para la viceconsejería de Política Lingüística. El motivo y objetivo que nos movió a lanzar el proyecto EGOD queda claramente sintetizado en el programa de trabajo propuesto por la viceconsejería de Política Lingüística al Consejo Asesor del Euskera, el cual recogía literalmente lo que sigue: “analizar, contrastar, renovar y poner en vías de unificación los discursos sobre el euskera”. Y, para mayor claridad, añadíamos: “el esfuerzo por poner en vías de unificación los discursos sobre el euskera requiere aceptar y llevar a la práctica un amplio consenso social y político”.
En este momento, el Consejo Asesor del Euskera está estudiando y debatiendo el documento ‘¿Y a partir de ahora qué?’, elaborado por la viceconsejería de Política Lingüística y que analiza las bases y marco de prioridades de la política lingüística para las próximas dos décadas. Se han celebrado ya tres reuniones, y se han recibido más de treinta aportaciones. En los próximos meses verá la luz el documento final del debate.
Partiendo de la plena consciencia de la importancia del discurso, se ha realizado otro esfuerzo que, a mi juicio, merece ser mencionado y puesto de relieve: el sólido e innovador documento titulado ‘Topaberri 66: berrikasi eta berrikusi’ (‘Topaberri 66: reaprender y revisar’), elaborado el pasado verano por Topalabea.
Relacionados con todo lo anterior, presentamos dos elementos en la rueda de prensa:
1.- El resumen del informe de resultados del programa EGOD. Es preciso recordar que el informe de resultados ha sido ya conocido por el propio pleno del Consejo Asesor del Euskera. En breve procederemos a presentárselo directamente a diversos agentes sociales.
2.- En el marco del proyecto EGOD, se han llevado a cabo, entre otras labores, numerosas investigaciones. A partir de la información proveniente de dichas investigaciones, hemos obtenido los contenidos concretos de lo que podría ser la intersección entre los diversos discursos. Esos contenidos de la intersección podrían constituir las bases del suelo común de un discurso compartido sobre el euskera.
El informe titulado ‘Análisis de los discursos básicos sobre el euskera’ —Proyecto EGOD, del 15-10-2015– recoge los cinco discursos principales en torno al euskera. Cada uno de dichos discursos está constituido por diversas frases (el discurso con menos frases tiene 4, y el que más tiene cuenta con 8), y cada frase lleva aparejado su propio grado de aceptación. En total, 33 frases. Tal como se explica en el estudio, dichos discursos no son excluyentes entre sí. Así, los ciudadanos pueden coincidir simultáneamente con los contenidos de más de uno de esos discursos. La cuestión es que el análisis EGOD no aclaraba (o precisaba), más allá de los discursos, cuáles son las ideas (preguntas o frases) principales compartidas simultáneamente por una amplia mayoría de la sociedad. Y es ese ejercicio de concreción el que se ha propuesto realizar la viceconsejería de Política Lingüística.
«Existe un suelo común para un discurso compartido, en el cual ciudadanos de diferentes sensibilidades expresan claramente, a partir del respeto mutuo, una actitud favorable y de amparo hacia el euskera»
A tenor de las conclusiones extraídas de dicho ejercicio, existe un suelo común para un discurso compartido, en el cual ciudadanos de diferentes sensibilidades expresan claramente, a partir del respeto mutuo, una actitud favorable y de amparo hacia el euskera.
Desde la viceconsejería de Política Lingüística, hemos apreciado la necesidad de fortalecer ese suelo común. La cuestión, por supuesto, y también esto se debe expresar con nitidez, no consiste en suprimir el discurso o el punto de vista de nadie. Cualquier discurso que respete el discurso y opción lingüística del prójimo es lícito y respetable. Así lo exige la convivencia. Pero la convivencia exige también que se comparta lo básico, también en materia lingüística.
Para hallar los cimientos de ese suelo común, se han escogido las frases que concitan más de un 66,6% de acuerdo (‘Completamente’ más ‘bastante de acuerdo’), tanto si provienen de los cinco discursos identificados como si se trata de ideas extraídas de otras preguntas realizadas en el transcurso de la investigación. Dos tercios o dos de cada tres no es sino una convención, pero creemos que situando el mínimo en dos tercios se consigue reflejar un amplio consenso social y político. El umbral de aceptación, por tanto, es de dos tercios. A continuación, se han recogido únicamente aquellas de las 33 frases de los cinco discursos que han superado el umbral de aceptación de dos tercios y otras cuatro frases que han superado igualmente dicho umbral de aceptación: un total de veintiuna frases. Las frases que han superado el umbral de dos tercios pertenecen a cuatro de los cinco discursos: el denominado discurso receloso no contiene ninguna frase que alcance ese umbral.
Existen, cómo no, determinados puntos de vista que conllevan desacuerdo y discusión. Entre las 33 frases recogidas en los discursos las hay que se alejan del suelo común en mayor o menor medida. Pero una muy amplia mayoría de la ciudadanía hace suyo el respeto mutuo, el valor pragmático del euskera y el fomento del euskera. Mediante este ejercicio obtenemos, por tanto, las siguientes informaciones:
- Cuáles son las ideas aceptadas por al menos dos tercios de la sociedad.
- Qué proporción de la ciudadanía de la CAPV comparte simultáneamente todas esas frases. O dicho de otro modo, la intersección de quienes han expresado su acuerdo con tales frases.
Las que siguen son esas 21 ideas, ordenadas por su nivel de aceptación:
- Es importante que los niños y niñas aprendan inglés (‘Completamente’ más ‘bastante de acuerdo, 96%).
- Es importante que los niños y niñas sepan castellano (95%).
- Es importante que los niños y niñas sepan euskera (93%).
- Cada persona tiene el derecho de elegir la lengua que prefiera y la obligación de respetar la elección de los demás (93%).
- Hay que fomentar el respeto entre vascohablantes y castellanohablantes (93%).
- Se debería respetar la voluntad de la clientela/ciudadanía de ser atendida tanto en euskera como en castellano en los establecimientos comerciales, en las empresas y en la administración (90%).
- Las personas que no saben euskera también deberían apoyar su normalización (87%).
- Es importante que los vascohablantes tengan oportunidad de usar el euskera donde deseen (87%).
- Es importante alcanzar un acuerdo que respete los derechos lingüísticos de todos y todas (86%).
- La gente que sabe euskera tiene más oportunidades (86%).
- Toda la población, incluidas las personas que no saben euskera, debería sentirse orgullosa de que aquí, y en ningún otro lugar, exista el euskera (84%).
- Sería importante que la mayor parte de la población de Euskadi aprendiera euskera (83%).
- Los vascohablantes deben comprender que mucha gente no puede aprender euskera (80%).
- Saber euskera facilita la integración en nuestra sociedad y en nuestra cultura (79%).
- El euskera es cada vez más necesario para obtener trabajo (76%).
- Hay que hacer esfuerzos para que el euskera y el castellano estén al mismo nivel, y no uno por encima del otro (75%).
- Es imprescindible emplear dinero público en la promoción del euskera (75%).
- Los castellanohablantes, a pesar de no entender el euskera, deben aceptar que los vascohablantes hablen entre ellos en esa lengua (71%).
- Habría que exigir el conocimiento del euskera en determinados puestos de trabajo (71%).
- Tengo interés hacia el euskera (69%).
- Estoy a favor de la presencia y uso del euskera en el futuro (68%).
El vídeo de la rueda de prensa ya está disponible, a través de Irekia.